martes, 21 de octubre de 2008

Discurso del Lic. Franciso Flores a los Alumnos del PCA

Discurso Sherpas
Club Sherpas
San Salvador
18 de Oct. 2008



Estimado Luis Mario, a la vez que te agradezco la invitación, quiero disculparme contigo por no haber podido estar con ustedes la última vez que me invitaron.

Estimados directivos del Club Sherpas

Se me ha pedido que el tema del liderazgo con ustedes esta mañana. Enfocar el tema bajo una perspectiva puramente personal me permitirá desnudarles mi experiencia y así compartir con ustedes no solo mi vivencia sino mi entendimiento

A finales del siglo pasado, un niño se extravió en la selva y fue encontrado años después, por unos misioneros franceses. Milagrosamente había sobrevivido sin ningún contacto humano que le asistiera. Cuando fue descubierto, no tenía ni el uso del lenguaje, ni había logrado la posición erecta a sus 17 años. Gruñía y era totalmente dominado por su instinto. No tenía ninguna de las cualidades que nosotros llamaríamos humanas.

El mito que tuvieron algunos pensadores
Hace siglos, de que el ser humano se desarrolla natural e instantáneamente es falso. El hombre es producto del proceso de socialización, de los valores que le imprime su educación, y por supuesto de las decisiones que toma. Somos humanos entonces, en tanto somos sociales, parte de una colectividad.

Todos los grupos derivan su coherencia del propósito que persiguen. Este propósito es siempre una visión compuesta por primero, la idea que tiene el grupo de si mismo, segundo el concepto que tienen del mundo que habitan, y tercero, sus más profundas aspiraciones sobre el futuro. Estas tres se integran en una trilogía para darle sentido a su existencia.

Los líderes son aquellos individuos que comprendiendo las aspiraciones del grupo, y capaces de superar los obstáculos prácticos que les presenta el entorno, construyen una visión que despierta las energías de todos, concentran esta energía en un objetivo y así conducen al grupo hacia la meta que han definido.

En este proceso los lideres mas efectivos son los que encarnan la visión. Esto sucede cuando el líder, en su esfuerzo por llevar al grupo a sus objetivos, lo que dice y lo que hace, se corresponden perfectamente.

De aquí la gran necesidad que tienen los lideres de comunicar: así señalan objetivos, manejan expectativas, explican tropiezos, y logran mantener viva la llama del ideal que se persigue en la mente del grupo.

Entre mas pequeño el grupo menor necesidad de comunicar verbalmente pues al estar el líder en constante relación con el grupo sus acciones hablan por si mismas. Entre más grande el grupo mayor necesidad de comunicar, pues sus acciones no son suficientes para mantener a todos los miembros del grupo involucrados.

Por estas razones que hemos conversado es que el liderazgo tiene su razón de ser en la naturaleza humana y en la naturaleza del comportamiento humano en sociedad. En pocas palabras, es imposible plantearse el desarrollo de la sociedad humana sin el papel de los líderes.


Un breve y modesto ejemplo tal vez sirva para aclarar la idea. Ustedes saben que cuando uno es adolescente lo peor que le puede suceder es estar obligado a estar en compañía de los adultos cuando uno añora a sus cheros, y la libertad de ir donde le apunte la nariz.

A mis quince anos la semana santa era un martirio. No me podía escapar. Eran nueve largos días en una [laya llamada Sihuapilapa. ya se imaginan: los adultos cuando estaban comiendo, repetían los mismos chistes de la temporada pasada, y cuando estaban durmiendo en las hamacas, nos obligaban a un silencio absoluto. Para colmo de males todo era peligroso: desde el mar hasta el festón de las vecinas.

Masticando mi aburrimiento y caminando un día en la playa, me acerque a un pescador que con su red observaba las olas. Nos sentamos a platicar en la arena y me dijo que le decían pistola. Era fácil entender porque. De piernas cortas y una gran capacidad toraxica, con la piel curtida por el sol en realidad parecía pistolita Beretta.

Platicando me dijo pistola: mira bicho, yo conozco un lugar que no conoces vos. Fíjate que allá mar adentro, hay una gran montaña y el filo del cráter esta tan pachito que podes ver a los tiburones cazando, manta rayas enormes y todo tipo de pescados. Si tenes… yo te llevo! ‘Pues mira pistola’, le dije, ‘a mi esa tu onda me fascina’.

Decidí ir a la laguna, pero tenía grandes problemas, mi hermano y sus amigos eran mayores- no era fácil que le creyeran al menor del grupo. Había que embarcarse en la pequeña panga del amigo de pistola. Tenía que conseguir que al menos uno de los adultos se convirtiera en mi aliado y minimizara los riesgos ante el resto.

Después de mucho cabildeo, y mucha preparación una madrugada estábamos adentro de la lancha, esperando que las olas nos dieran un espacio para cruzar la reventazon y entrar al mar abierto.

Al inicio el grupo estaba entusiasmado. La brisa y las montanas vistas desde el mar tenían a todos hipnotizados. Pero todo cambió cuando perdimos de vista la costa, y se perdió la seguridad de tener cerca el punto de partida. Nos había envuelto el inmenso mar y nuestra pequeña panga era una hoja en esa inmensidad.

Note una profunda inquietud en el grupo. Empezaron a dirigirme bromas pesadas que eran en realidad acusaciones y a ponerse agresivos. Uno de ellos le quiso quitar el timón a “Pistola”. Aunque percibía claramente lo destructivo que era ese miedo sin control no podía imponerme al grupo por la fuerza porque sencillamente eran más y mucho más fuertes que yo.

Entonces le dije a “Pistola”, ‘apaga el motor’. Y me pare en la lancha para que todos me oyeran claramente y les dije “nos podemos regresar a la costa en este instante. Pero permítanme explicarles porqué digo que vamos en el rumbo correcto y que nos falta ya, el menor trecho.

Sigamos adelante media hora mas y si no les parece volvemos”. Se tranquilizaron un poco, volvimos a arrancar los motores y llegamos a la laguna. Fue maravilloso. Era lo que había dicho pistola y mucho mas- un verdadero paraíso adentro del mar.

Al regresar y estar encayando la lancha, cuando uno de los amigos le pregunto a pistola que cuando nos volvíamos a embarcar, le dijo encogiendo los hombros y apuntándome “pregúntele al capitán”. Era medio en broma medio en serio, pero para mi ¡que honor me hizo “pistola” ese día!

Esa fue nuestra última semana santa aburrida. Vinieron después muchas aventuras, cada vez más lejos, cada vez más plenas.

Unos anos después falleció mi hermano, y a los pocos anos también Pistola. Hoy cada vez que me embarco los llevo conmigo. Esa primera expedición me marco de por vida.

Esta sencilla experiencia de un grupo de adolescentes, tiene todos los elementos básicos del ejercicio del liderazgo. Se parte de madurar una visión en nuestro interior y de apasionarnos por ella. Después hay que tomarse la tarea de convertirla en una cosa práctica, en una estrategia de acción. Una vez contamos con el entusiasmo para contagiar a los demás, y el programa de acción que les haga sumarse, podemos conducir al grupo a un objetivo.

Siempre sucede que la visión que hemos creado en la mente de los demás se borra en cuanto aparecen los sacrificios y los compromisos. A mitad del camino se crea un vacío pues todavía falta esfuerzo para llegar al objetivo. Este es el momento más difícil. Y como se maneja la crisis determinara si el grupo continuara convencido en su líder o abandonara el proyecto. Este momento es el más difícil y sucede siempre: en una empresa, en un equipo deportivo, o en un país.

Si bien esta es la dinámica esencial de todo proceso de liderazgo, es importante decir que cada reto que se propone un grupo requiere de un tipo de liderazgo que encaje con la circunstancia de ese reto.

Existen distintos tipos de liderazgos pues cambian de acuerdo a las circunstancias. Hace unos años, un grupo de científicos decidió explorar una parte del bosque africano, que nunca había sido investigado, con el propósito de estudiar sus plantas y su fauna. Iniciaron en la parte sur oriental del África, partiendo de la parte montañosa hasta llegar a la costa.

Como guías habían incluido en el equipo, un grupo de pigmeos nativos de esa selva y que serian los guías en la travesía. Era un equipo multidisciplinario, compuesto principalmente por ingleses y americanos, formados en la tradición del diálogo, y en el trabajo en equipo.

Al principio sostenían reuniones de trabajo al final del día para compartir sus hallazgos y decidir conjuntamente el trabajo del siguiente día. Cada uno de ellos aportaba de su conocimiento y las decisiones se tomaban por consenso.

Sin embargo al internarse en la selva profunda varios de los miembros se enferman y fallece el jefe de los guías. La situación se vuelve crítica cuando varios de sus guías abandonan la expedición. Llega el momento en que están profundamente amenazados. La mayor parte de ellos están enfermos, se les está agotando sus recursos de alimentación, han perdido al mejor guía y están cruzando tierra totalmente inhóspita.

Repentinamente al final del día en una de sus reuniones en vez de sentarse todos a tomar una decisión, uno de ellos asume la autoridad del grupo. En ese momento cambia completamente el tipo de liderazgo.

No escucha las quejas del grupo. Asigna responsabilidades, se pone al frente de una marcha forzada, pues comprende que si se agotan sus recursos morirán todos. Ordena lo que se va ha hacer, no permite que se le contradiga y suprime con su fuerza de carácter cualquier comportamiento negativo.
Con su coraje y valentía personal, logra sacar al grupo de la selva.

Es importante entender que a mayor nivel de riesgo del grupo, más definido, perfilado y fuerte es la autoridad del líder. Y entre más estable, seguro el grupo, mayor la necesidad de diálogo y comunicación.

Por esto es que no todos los líderes funcionan con la misma efectividad cuando cambian las circunstancias. Cuando Londres estaba sometido al bombardeo inmisericorde de los aviones Nazis, Inglaterra encontró en Winston Churchill al líder perfecto para inyectarle valor a la ciudadanía y planificar la Guerra.

Su famosa frase “No les prometo nada mas que sangre, sudor y lagrimas…” Era un llamado al sacrificio total por su patria que les dio a los ingleses el coraje que necesitaban para desafiar a Hitler y vencerlo. Sin embargo, cuando vino la Paz, fue derrotado estrepitosamente en las elecciones. No era un líder para la Paz, era un líder para la Guerra.

Otra distinción que quiero hacer sobre los tipos de liderazgo es que en todas aquellas organizaciones que tienen por su proyección en el tiempo, cierto grado de institucionalidad. Quiero decir jerarquías claramente establecidas y manuales que señalan claramente el alcance y responsabilidades del cargo. Como es el caso del ejército, empresas de mucha tradición o instituciones de gobierno; se presenta el fenómeno de la discrepancia entre el liderazgo formal y el liderazgo real.

Lo que quiero decir es que en estas organizaciones el que tiene el más alto cargo, no es necesariamente el verdadero líder. Este es el caso del Coronel Monterrosa. Durante el conflicto armado, sus compañeros me han contado, que al encontrarse en el escenario de Guerra bajo el fuego nutrido de los enfrentamientos con la guerrilla, aunque las ordenes vinieran de sus superiores, todos los que estaban bajo fuego seguían a Monterrosa, aunque en ese entonces fuera solo un teniente.

Su calma frente al peligro, y su discernimiento rápido y penetrante de la situación de su tropa lo convertía de inmediato en el líder nato. No siempre el que formalmente preside una organización es el líder. Al final, es el grupo el que decide.

Ahora que hemos discutido la naturaleza del liderazgo y sus distintas formas es necesario preguntarnos ¿Cómo se forma un líder, cómo es que una personalidad adquiere las destrezas que necesita un líder?

Antes quiero aclarar que los líderes no son iluminados, súper hombres o mujeres. Son personas comunes y corrientes que han desarrollado las destrezas para conducir a los demás.

Los que son excepcionales generalmente es porque se han enfrentado a problemas excepcionales y su natural entrega los ha hecho crecerse a la altura de las circunstancias. Y A veces es la misma colectividad, al verse necesitada de un símbolo en quien creer, la que les atribuye características sobrehumanas.

Quisiera contestar esta interrogante sobre como se forman los lideres planteando lo que a mi criterio son sus características mas importantes.

La primera y por mucho la mas importante es descubrir quienes somos. Si no sabemos ni quienes somos ni que queremos poco podemos contribuir a los demás. Es necesario descubrir cual es esa característica que nos hace seres únicos, irrepetibles en toda la creación y que en el desarrollo de la misma estriba tanto nuestra contribución a la sociedad como nuestra mas profunda realización personal.

El proceso de descubrir nuestras destrezas y nuestras pasiones es un camino largo. Inicia con estar abiertos a exponernos a distintos campos del conocimiento y actividades, de forma que estudiando y haciendo vayamos descartando lo que no nos gusta y descubriendo para lo que somos buenos.

Puede que sea un maestro el que nos abre un nuevo horizonte. Hay quienes dedican su vida a comprender para poder explicar. En algunos casos, la profundidad de su mente se encuentra con la integridad de sus personalidades y la elocuencia de sus palabras. En estos casos nos descubren un
Universo que jamás imaginábamos. Nos entregan un territorio antes desconocido
Y nos brindan las destrezas para navegar en el.

A veces también puede ser un libro. Lo que en nuestra mente es apenas un confuso presentimiento, inexpresable por su ambigüedad, en las grandes mentes es un pensamiento lucido; expresado con tal coherencia y belleza de lenguaje que a su encuentro tenemos la sensación de descubrirnos a nosotros mismos. Nos sorprendemos ante el impacto de ver plasmado con total claridad lo que apenas intuyamos y buscábamos.

El poder de las ideas es tal que nos descubren un universo que antes no imaginábamos .Y nos entregan un mapa básico para explorar ese nuevo mundo.

Este es el especial aporte de los grandes pensadores. Y por eso es que muchos , que desprecian los libros y descartan a los sabios como molestos estorbos, son los que se pierden la claridad de ver iluminado su camino con una respuesta que no encuentran y necesitan, e irónicamente ha sido descubierta siglos atrás.

Por esto es que se ha dicho a través de la historia que la arrogancia es seguro signo de ignorancia y la humildad seguro camino al conocimiento.

Otra ruta al autodescubrimiento son las adversidades y el sufrimiento. Dostoevsky el gran escritor ruso fue objeto de una cruel maniobra departe del Tsar. Fue condenado a muerte y encerrado en una mugrienta celda y llevado al patíbulo para ser decapitado en la plaza publica. Sus manos atadas y cubierto el rostro con un saco, hincado reposo su cabeza sobre un trozo de madera. Cuando el verdugo levanto el hacha para decapitarlo. Un jinete lo detuvo mostrándole el acta con la que el Tsar lo perdonaba.

Este evento cambio su existencia. Tomo conciencia de lo corto y precioso que es el tiempo que estamos en esta tierra. Sus grandes capacidades creativas se despertaron ante la realización que no tenia tiempo que perder. Todas sus grandes obras, como Los Hermanos Karamazov y Crimen y Castigo vinieron después de este evento.

Las adversidades y los sufrimientos son la manera que tiene la vida de hacernos higiene espiritual: tiran por la borda todo lo que es superficial y excesivo en la personalidad. Nos afianzan nuestros valores mas sentidos, nos descubren capacidades y energías que no creíamos tener. Definen nuestra personalidad y nos impulsan a evolucionar a ser mejores seres humanos.

En otros casos es un mentor. Alguien que por su experiencia, tiene la capacidad de identificar para nosotros una opción impensada hasta entonces, y que una vez le damos una oportunidad resulta que empata perfectamente con nuestras particulares destrezas y aspiraciones.

Cuando decidí competir por la presidencia en 1998, comprendí que para construir un legado que perdurara necesitaba contar con un programa de gobierno que recogiera las mas sentidas aspiraciones de los salvadoreños, que pudiera ser realizado en cinco anos con el nivel de recursos conque contaba el país, y que evitara esa tradición de improvisación tan común en nuestra vida nacional.

A este esfuerzo le dedique un ano entero, conviviendo con salvadoreños de todos los signos y circunstancias y por toda la geografía nacional.

Escogí a un pequeño equipo para que me acompañaran. Primero Al ingeniero Miguel lacayo, la Dra. Jacir de Lovo, y la Lic. Mariah Eugenia de Avila. Muy poco después al Lic. José Ángel Quirós y el Dr. Juan José Daboud

Cuando llego la hora de ejecutar el plan que habíamos trabajado los seis. Me encontré conque a ninguno de ellos les parecía lógico o natural el cargo que les había asignado. “El que… “me decían, “Yo Canciller” “Como se te ha ocurrido eso?” “Ministro de Hacienda?… Jamás” “La cartera de Educación, como vas a creer, si ese es un cargo político… yo soy una técnica.”

Anos después cada uno me admitió que el cargo que les pedí era la perfecta es cogitación para la destreza de cada uno. Fueron enormemente exitosos, y cada uno de ellos es un orgullo para nuestro país.

A veces los que nos observan tienen una mayor claridad sobre nuestra vocación, por la sencilla razón que parten de observarnos objetivamente, y no tienen la predisposición, que todos tenemos, de definir nuestra identidad en términos mas estrechos. Por esto es que los mentores juegan un papel crucial en descubrir nuestras potencialidades y ofrecernos una oportunidad para desarrollarlas.

Para mi la primera llave del autodescubrimiento es ese sentido de entrega total a lo que hacemos, no importa lo que fuere, buscando la perfección e involucrándonos totalmente en nuestra actividad. Ella nos permite ejercitar todos nuestros músculos morales y aunque suene tan aburrido y laborioso, es en realidad ultra estimulante ya que nos brinda un gran sentido de autoestima y satisfacción.

Mis mayores satisfacciones han sido siempre cuando he podido decir al final del día “Hoy hice todo lo que pude”. Esta es la mejor manera de aprender quienes somos y para que somos buenos.

Lo único que tenemos garantizado en la vida es que habrá tropiezos en todo lo que emprendamos. En vez de considerar cada tropiezo un desastre personal considérenlo una oportunidad para aprender. A ver...” que Devi haber hecho diferente?” “ que lección hay aquí encerrada en este problema?”

La perseverancia más que una terca obstinación por lograr una meta es en realidad una manera distinta de ver los problemas.

El Dalai Lama, siendo un joven adolescente como ustedes accedieron a abrir las puertas de su país el Tíbet, a China Continental. El régimen dictatorial de China Comunista aprovecho la oportunidad para asesinar a la mayoría de monjes Tibetanos, bombardear los monasterios y apoderarse del país.

El busco refugio para su pueblo en la vecina India. Por anos ha buscado infructuosamente volver a su patria y ha tenido que recibir a los exiliados tibetanos que cruzando a pie las montanas llegan a Nepal y después a La India, mutilados porque sus pies o manos se congelaron, o destrozados porque alguno de sus pequeños hijos murió en el camino.

A pesar de esto su liderazgo y su lucha son tan fuertes que ha mantenido unido al pueblo tibetano. Este hombre que por cincuenta anos ha sufrido una de las tragedias más dolorosas de la historia moderna nos dice,

NO SE RINDAN
TRABAJEN POR LA PAZ
EN SU CORAZON Y EN EL MUNDO
Y LES REPITO
NUNCA SE RINDAN
NO IMPORTA LO QUE ESTE SUCEDIENDO
NO IMPORTA LO QUE PASE A SU ALREDEDOR
NUNCA
NUNCA SE RINDAN

La perseverancia es sin duda la forma de
Ser valientes todos los días, y la mejor aliada en nuestro proceso de autodescubrimiento.


Ante estas preguntas tan difíciles, como su formación, su futuro y su misión en la vida les pido que tengan paciencia, y que consideren estas cosas no resueltas como paquetes que abrirán algún DIA. Hay preguntas en la vida cuya respuesta no estamos preparados a vivir.

Por lo tanto disfruten el involucramiento con sus inquietudes no resueltas. Están tan jóvenes que bien pueden gozar y vivir las preguntas sin precipitarse a encontrar contestaciones prematuras.

Aparte de tener la confianza en si mismos que les ha proporcionado el haberse encontrado, los líderes deben desarrollar y poseer en grado sumo estas características:

Lealtad a sus ideales, a la colectividad a la que sirve y a su equipo. Valentía para arriesgarse, superar obstáculos y proteger al grupo. Valentía también para enfrentar los periodos de rechazo, los ataques constantes de sus adversarios y la soledad. Necesitan tener el coraje de funcionar en tiempos de profunda adversidad.

Vigor emocional y físico. Los líderes necesitan ser emocionalmente vigorosos para recuperarse rápidamente de los golpes y mantener su fuerza emocional para tener claridad de pensamiento y persistencia ante retos que parecen inmensos.

Es indispensable que sean saludables. No se puede dirigir desde la cama de un hospital. Hay que fortalecer el cuerpo haciendo ejercicio, alimentándose adecuadamente y jamás contaminando el organismo con drogas o alcohol.

Sensibilidad. Un líder que no le importan los sufrimientos de su gente no puede ni comprender sus problemas ni desarrollar soluciones efectivas para serle útil a su grupo.

Credibilidad. Cuando un líder compromete su palabra, debe estar decidido a cumplirla. Los que le siguen deben saber que cuando habla, dice lo que piensa, y actuara sobre su palabra. Un líder que no tiene credibilidad pierde la voluntad del grupo y este es su más valioso recurso.

Responsabilidad. Los líderes son necesarios porque la colectividad necesita encomendarles su destino. Si un líder no esta dispuesto a aceptar plenamente sus responsabilidades, incluyendo sus errores, significa que no corregirá los defectos de sus decisiones. El grupo concluirá que no esta a la altura de la misión que se le ha encomendado.

Efectividad. Un líder debe producir resultados. Para eso es líder, para alcanzar las metas que el grupo le ha delegado. Si un líder no es efectivo, más tarde o más temprano el grupo concluye que… no era un líder.

Elocuencia. Es necesario que los líderes puedan tocar con sus palabras los sentimientos más profundos del grupo. Para lograr grandes objetivos es necesario que muchos individuos se sumen al proyecto. Esto se logra cuando el líder puede despertar con sus palabras las energías necesarias: inyectarle valor a un grupo atemorizado, fe en su futuro al dibujar la visión que se persigue, autoestima y confianza en si mismos al recordarles sus logros pasados. La elocuencia es el instrumento para despertar, unificar y dirigir las energías del grupo.

Algunos de ustedes estarán preguntándose, que es el carisma? Carisma es una palabra cuya raíz Latina es caris o gracia. Carisma significa estar rodeado de una aureola de simpatía. Hay dos tipos. El primero es la conjunción de los elementos anteriores, lealtad, valentía, vigor, salud, sensibilidad, credibilidad, responsabilidad, efectividad y elocuencia.

Cuando el carisma proviene de estas características, seguramente esa persona es un gran líder. Pero a veces sucede que hay personas carismáticas, atractivas que no poseen estas características. Su simpatía proviene de otras fuentes.

En Sur America conocí a un alcalde cercano a la selva amazónica, que amanecía en cualquier día de la semana borracho y dormido en la cuneta de cualquier calle del pueblo. El pueblo era un desastre pero la gente lo adoraba. Cuando su partido decidió no llevarlo de alcalde, simplemente corrió por otro partido y volvió a ganar. Tenia carisma? Si, pero no era un líder.

Quiero finalizar haciéndoles una exhortación.
Participen. Si no les gusta como se conduce su comunidad, su escuela, su país, ofrézcanse a ayudar. Conviertan esos sentimientos en algo positivo que les permita desarrollar sus destrezas y encontrar su camino.

No critiquen, involúcrense. Déjenle a la generación que viene tras de ustedes un mejor país que el que encontraron.

En nombre de mi generación les digo lo siguiente. Cuando nosotros teníamos su edad estallo la Guerra. No hay uno de nosotros que no guarde luto por un ser querido desde esa época. Era entonces un peligro trabajar, era un peligro caminar, era incluso un peligro hablar. Pero no nos acobardamos .

A pesar que todo parecía estar perdido decidimos defender nuestro terruño. Este rinconcito de tierra que quiso el destino fuera nuestra patria. Lo defendimos y lo reconstruimos. Hoy se los entregamos.

Cuídenlo. No lo den por descontado. Puede volverse a perder. La patria es como el aire que respiramos. No tenemos siquiera conciencia que existe, pero si nos faltara nos asfixiaríamos en un mundo que perdería el sentido pues habríamos perdido nuestras raíces y nuestros recuerdos.


Si el día llegara en que tienen que volver a defenderlo no lo duden. Se los dice quien lleva orgulloso las cicatrices de haber hecho su responsabilidad por su país.

GRACIAS QUERIDOS JOVENES.

QUE LA VIDA LES CUMPLA SUS GRANDES ASPIRACIONES.

Video PCA

La Crisis Silenciosa

Texto del video para el PCA por el Presidente Honorario del PCA: Dr. Ricardo Rivas Larrave.

Estimados estudiantes, quisiera compartir con ustedes algunas reflexiones sobre esta etapa de la globalización que estamos viviendo.

En un mundo cada vez más competitivo, es importante que ustedes sean capaces de captar algunos elementos que les permitan estar listos para su futuro. Desde esta perspectiva, quiero hablarles de lo necesario que es prepararse para el trabajo en una sociedad global cada vez más exigente.

Con el avance de la humanidad, las comunicaciones y la tecnología, el mundo de hoy exige un trabajo más intelectual y menos físico. En los últimos años, ha habido una inversión masiva en tecnología, especialmente en la burbuja de las empresas llamadas “puntocom”, cuando cientos de millones de dólares fueron invertidos en poner conectividad de banda ancha alrededor del mundo, cables bajo el mar, y todas esas cosas.

Eso mismo hizo que las computadoras se hicieran más baratas y alcanzaran hasta los últimos rincones de la tierra. También hubo una explosión de software, correo electrónico, motores de búsqueda como Google, y software propietario, que permite cortar en trozos el trabajo y enviar una parte a Boston, otra a Bangalore, en la India y el resto a Beijing, haciendo más fácil a cualquiera lograr un desarrollo remoto.

Cuando todas estas cosas se dieron juntas, alrededor del año 2000, se creó una plataforma donde el trabajo intelectual –eso que llaman: “el capital intelectual”- pudo ser entregado desde cualquier parte. Ahora, años después, las tareas se pueden separar, distribuir, entregar, producir y volver a ponerse juntas otra vez, dando un nuevo grado de libertad a la manera en que hacemos el trabajo, especialmente el trabajo de naturaleza intelectual.

Hoy tenemos una demanda brutal de inteligencia. Existe una tremenda necesidad de gente intelectualmente preparada. Necesidad de innovación, de creatividad. Ahora ya no es como antes, cuando muchos triunfaban simplemente por ser constantes: como “Don Fulanito”, por ejemplo, que comenzaba a trabajar a las siete de la mañana y terminaba a las diez de la noche, que fue perseverante y tenaz, y por eso se hizo rico. Eso, simplemente, ya no ocurre así.

Estamos en una etapa en la que el trabajo del hombre tendrá que ser expresado en su profundidad, en el alcance de sus capacidades y acciones, y no simplemente por las horas que trabaje. Una etapa en donde la divisa de tu trabajo, es tu inteligencia.

Pero, debes de pensar que la inteligencia no es patrimonio exclusivo tuyo. En el aula o en la universidad, hay personas – como el que está a la par tuya, atrás o delante de ti - que han tenido y tienen las mismas oportunidades que tú: han ido al kinder, a la preparatoria, han cursado su primaria y secundaria, se han graduado de bachilleres, estudian en la universidad…en fin.

Incluso, tienen una preparación muy similar a la tuya. Poseen las mismas herramientas: saben álgebra, trigonometría, historia, hablan inglés… Tienen conocimientos universales –de ahí la palabra universidad-. Entonces… la pregunta es inminente, ¿Qué elemento hará que sobresalgas entre los demás? ¿Qué te hará diferente?

En esta etapa que te ha tocado vivir, ya no solo compites con el de a la par –con tus cheros-. En esta etapa de la globalización, compites con un noruego, con un chino, o con un hindú, que también quiere el puesto de trabajo al que tú aspiras. Ese que a lo mejor está cerca de tu casa.

Si quieres apreciar la clase de desafío que estamos enfrentando, déjame compartir contigo dos anécdotas. La primera sucede en 1998, cuando Microsoft estaba por instalar uno de sus centros de investigación en Beijing. Esta compañía envió sus equipos a las mejores universidades chinas para administrar pruebas de coeficiente intelectual, y así poder reclutar a los mejores cerebros entre los 1,300 millones de personas que viven en China. De los 2,000 estudiantes más valiosos en ingeniería y ciencia examinados, Microsoft contrató a 20. Desde entonces, en Microsoft Asia tienen un dicho que simplifica muy bien la intensidad de la competencia por ganar un puesto de trabajo en esa nación, y que explica por qué China es ya uno de los centros de investigación más productivos de Microsoft: Éste dice así: “Recuerda, en China, cuando eres uno en un millón, hay otras 1,300 personas como tú”.

La otra anécdota es la de una joven hindú que inició una empresa de videojuegos desde Bangalore. “Por favor míreme bien”, decía. Soy de India. Hemos estado a un nivel muy inferior en términos de tecnología y negocios. Pero una vez vimos que teníamos la estructura que hacía del mundo un lugar pequeño, y rápidamente comenzamos a hacer uso de esa ventaja. No hay tiempo para descansar -advertía esta joven hindú-. Eso se ha ido. Hay docenas de personas que están haciendo la misma cosa que tú estas haciendo, y tratan de hacerla mejor. Esto es como el agua en una bandeja: se sacude y va a encontrar el camino que ofrezca menos resistencia. Eso es lo que está pasando en tantos trabajos: se irán a esa esquina del mundo que ofrezca menor resistencia y mayor oportunidad. Si hay una persona con talento en Timbuktú, conseguirá trabajo si sabe cómo acceder al resto del mundo, lo que ahora es muy fácil. Puedes tener un sitio Web y una dirección de correo electrónico y ya está. Y si eres capaz de demostrar tu trabajo, usando la misma estructura, y si la gente va dándote trabajo, y eres diligente, honrado y transparente en tus transacciones… ya estás en el negocio”- concluye diciendo nuestra amiga de la India.

Ciertamente, no podemos cruzarnos de brazos; no hay tiempo para relajarnos. ¿Cuál es el elemento que hará que sobresalgas entre los demás? ¿Cuál es ese plus –ese más- que hará que tú seas diferente?

“Ir a más” hace la diferencia. No conformarme con los programas de estudio que me ofrecen. Investigar más de lo que me mandan los catedráticos. Buscar más experiencias de las que la universidad me exige. Porque, en esta etapa el trabajador intelectual será el producto de la calidad de sus experiencias. Y tus experiencias serán buenas, si son muchas. Y serán malas, si son pocas.

Ya no será garantía tener un título profesional para ser exitoso. La sola preparación no basta para conseguir trabajo en un mundo demandante de capacidades. «Aquí está mi “cartón” (de lo que sea: de médico, odontólogo, o de abogado), y entonces fácilmente voy a conseguir trabajo...». Eso ya no es así.

Pero no te digo esto para que te desanimes, o para qué te preguntes: Entonces… ¿para qué estudio?. Te digo todo esto para que no desperdicies el tiempo, para que aproveches las oportunidades que se te presenten. Porque tú serás el producto de cómo sepas aprovechar esa oportunidades que se te presenten. Ese será tu activo, tu activo fijo, el potencial de tu desenvolvimiento.

Y una última anécdota. Es sobre la vida a la luz de la muerte. Hace algunos años leí en un libro de San Josemaría Escrivá, fundador del Opus Dei, algo que venía a decir que: por lo menos una vez al día, debes poner tu pensamiento en trance de muerte –esto es, imaginarte tu muerte- para poner bajo esa luz, los sucesos de cada jornada (Forja, 1038).

Mientras leí esto, pensaba ¿y si hoy fuese el último día de mi vida? ¿quisiera hacer lo que voy a hacer hoy? Si la respuesta era “no” durante varios días seguidos, sabría que tenía que cambiar algo.

Recordar que voy a morir pronto es la herramienta más importante que haya encontrado para ayudarme a tomar las grandes decisiones de mi vida. Porque prácticamente todo –las expectativas de los demás, el orgullo, el miedo al ridículo o al fracaso- se desvanece frente a la muerte, dejando sólo lo que es realmente importante. Recordar que vas a morir, es la mejor forma que conozco de evitar la trampa de pensar que tienes algo que perder, de no atreverte, de huir a los retos.

Hace casi dos años me diagnosticaron un cáncer. Los médicos me dijeron que era el tipo de cáncer más maligno, y que debían operarme inmediatamente o mi esperanza de vida podría reducirse a cuestión de meses. Afortunadamente, llegamos a tiempo, y me operaron de aquel melanoma en la espalda, justo en el momento adecuado. Dos meses después de esa intervención, me encontraron un defecto severo en una válvula del corazón que ya había producido una malformación de la arteria aorta. Y tuve que regresar al quirófano para una operación de corazón abierto. Una delicada intervención en la que técnicamente mi corazón fue sustituido durante ese tiempo por una máquina.

No tengo ningún reparo en decirte, que antes de cada operación preparé mi alma, y todo lo necesario para asegurar a mi familia y dejar todo arreglado, en caso que algo fatal ocurriera. En esos momentos, lo primero que se me vino a la cabeza fueron mis hijos. Imagínate, tenía que decirles en unos pocos meses, lo que pensaba irles diciendo en los próximos diez años.

Gracias a Dios, la operación del corazón salió bien y ahora me encuentro mejor que antes. Esto es lo más cerca que he estado de la muerte y espero que sea lo más cerca que esté de ella durante algunas décadas más.

Claro, habiendo vivido esto, ahora te puedo contar con más certeza lo que entonces era un concepto útil, pero puramente intelectual: Miren, nadie desea morir. Y sin embargo la muerte es el destino que todos compartimos. Nadie ha escapado de ella. Y así tiene que ser, porque la muerte es el mejor invento que tiene la vida. Es el agente de cambio de la vida. Retira lo viejo para dar espacio a lo nuevo. Ahora mismo hay jóvenes como tú, pero con mentalidad de viejos. Siento ser tan dramático, pero esto es bastante cierto.

Por tanto, no hay tiempo para descansar. El tiempo que tenemos es limitado. No lo malgastes viviendo de cualquier manera. No dejes que el ruido de las opiniones de otros, de los conformistas, ahogue la voz en tu interior de los ideales más altos. Y lo más importante: ten el coraje de luchar cada día por alcanzarlos.

Estoy convencido de que el hombre tiene un destino superior. Desde siempre ha venido evocando a una Divinidad, y el estudio es una de las mejores herramientas para conseguir ese fin. Si no te ocupas de tu formación, terminarás siendo un mediocre. Te digo esto, porque, no me puedes negar que a veces no le ponemos todas las ganas al estudio.

Esta es la crisis silenciosa que estamos pasando, la que nos está induciendo lenta y calladamente al conformismo, al confort, a la vida regalada… la que nos llevará irremediablemente al fracaso. Y cuando eso ocurre, a quienes les ocurre, suelen echarle la culpa de su fracaso a la mala suerte. La mala suerte no existe. La buena tampoco. Existen la buenas acciones, el esfuerzo, el empeño que pongas en las actividades que realices. Y es que, quien no da resultados, da pretextos.

En esta etapa de la globalización, los ganadores han tirado a un armario el GameBoy; invierten su tiempo en Internet para educarse y culturizarse, leen más; usan el iPod también para aprender un nuevo idioma; tienen ideas propias –no de copiar y pegar-; dedican tiempo a los más necesitados; aprenden a escribir y a hablar en público; viven la vida, no la gastan; crean, no sólo imitan lo que ven; no dejan pasar las oportunidades, las viven. Emprenden actividades que tienen valor. Hacen cosas que valen la pena. En fin, en vez de ser expertos en hablar de felicidad, son personas auténticamente felices.

He compartido contigo sólo algunas ideas. Con ellas y un grupo de amigos, catedráticos, empresarios, profesionales… diseñamos hace más de doce años el Programa de Complementación Académica, PCA

Espero que lo aproveches.

Muchas gracias.